¡Subo en barco y bajo sano y salvo! ¡La verdad es que ha sido emocionante!
Hemos llegado al puerto de Porvenir en el ferry y hemos conocido a Cari; una ciclista brasileña encantadora. No obstante, no podemos compartir mucho con ella porque nos agarra la lluvia y ella marcha hacia su hostal mientras nosotros buscamos un lugar chévere donde acampar. Tras buscar en varios lugares. encontramos una casa abandonada de un antiguo muelle y montamos el campamento.
Al día siguiente, acudimos al famoso asado de Porvenir y, nada más entrar, nos sorprenden unos colombianos; padre e hijo (Flaminio y Jair), ofreciéndonos una ducha de agua caliente y un techo, ¡así de la nada! Evidentemente, ¡no podemos decir que no!
Nos presentan al resto de la familia (Mario y Heyner) y tras compartir un rato con ellos vamos a su casa (también con un chileno llamado Fernández). Continuamos la fiesta allí tomando unas cervezas y... ¡La verdad es que ha sido muy divertido improvisar música con ellos!
Se hace tarde, la fiesta terminó y tenemos un techo donde descansar. Yo no pierdo el tiempo... ¡Me adueño de uno de los sacos de dormir (6)! Guaguagua (risa de perro).
Un día después, conocemos a Wacho; el gatete de Jair. El pobre tiene SIDA pero a mí me da igual, ¡es muy buena onda!
A la tarde, mis compis se han ido a dar una vuelta en bici y, ¡se han bañado en el 'estrecho de Magallanes'! ¡Están muy locos! Aunque bien es cierto que hace mucho calor por acá. Imaginad cómo es, que: han dado dos días libres a todo el mundo porque esto no está preparado para laburar (trabajar) con tanto calor. De hecho, un día después, hemos ido a la 'laguna verde' para bañarnos y parecía aquello 'Benidorm (según Tepe, porque yo no sé ni qué es 'Benidorm')'. Además, hoy hemos podido compartir con Cari más rato acá ¡Es puro amor!
Por su parte, Tepe va recogiendo plumas de aves y las va incorporando a su sombrero; parece ser que tinene la intención de llenarlo de plumas que vaya encontrando en el camino. La verdad es que no sé quién está peor de todos, no hay uno normal... ¡En esas cabezas hay algo que no funciona bien! ¡Os lo digo yo!
Por lo demás, os diré que en teoría deberíamos habernos marchado de aquí antes de ayer, pero han surgido algunas cosillas que os cuento en el próximo capítulo. Un anticipo, esta enana maravillosa, ¡se llama Tora!♥️
¡Guau, guau!
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